Hola de nuevo queridos lectores, pido disculpas por la demora en poner una entrada, pero había estado experimentando problemas para ingresar en mi blog, así que no había podido hacer nada hasta que al fin hoy pude ingresar. Muchas gracias a las personas que leen este blog y como se lo había prometido a una de mis lectoras, ahora escribo acerca de las amistades.
Mucha gente dice que lo que más hay que valorar es a la familia, respeto completamente esa opinión, sin embargo, creo que hay que verlo desde otro punto de vista. ¡Lo que más hay que valorar son las amistades sinceras e incondicionales! Estas dos aseveraciones no son mutuamente excluyentes, muchas veces las familias no son lo que esperamos; lastimosamente no elegimos en que familia venir al mundo, algunos tendrán mejor familia que otros, pero el punto de todo lo que acabo de decir es que hay que valorar mucho a la familia cuando los miembros de la misma se comportan como amigos sinceros.
Habiendo puesto esto sobre la mesa, me interesa hablar sobre mi opinión de las amistades. En lo personal, creo que las amistades son demasiado subestimadas, el lenguaje de nuevo se queda corto y si nos fijamos llamamos amigo a casi cualquier conocido que hallamos visto un par de veces. Las amistades son mucho más complejas que eso, sin embargo tampoco quiere decir que a un amigo hay que verlo todos los días para que la amistad se mantenga. En lo personal creo que una amistad es algo complejo, sonará cursi pero un amigo es una persona a la que se ama. En cierta manera nosotros tendemos a diferenciar a los amigos verdaderos de los conocidos a los que hemos visto un par de veces agregando el adjetivo "mejor"; para muchos el "mejor amigo" o la "mejor amiga" es todo, desde confidente, terapista y pañuelo de lágrimas hasta la persona con la que más se divierten y se sienten cómodos. Sin embargo, los humanos, algunos más que otros tendemos a apegarnos y la convivencia tiene mucho efecto sobre lo que pensamos sobre una persona. Esto yo lo veo como un engaño a nosotros mismos.
Sé que esto que digo suena a despiadado y descorazonado, pero por el contrario la reflexión que trato de plantear es la siguiente: ¿Será que mis "mejores amigos" son las personas con las que más me junto? ¿Son las personas con las que más me junto en las que más confío y con quienes mejor me conecto? Pues yo en lo personal creo que no necesariamente la respuesta a estas preguntas es "sí", creo que los mejores amigos no tienen que mantenerse hablando todo el día para seguir siéndolo, creo que un mejor amigo es más bien aquel con quien puedes pasar sin hacer nada ni hablar nada e igual estarás bien, la persona en la que confías ciegamente y sabes que estará allí siempre que necesites ayuda o apoyo en cualquier cosa. Hay que tener mucho cuidado y distinguir el apego emocional por convivencia y la verdadera amistad y no quiero sonar como su papá, pero se los digo queridos lectores por experiencia propia, soy jóven y sin embargo mi objetivo de vida es tratar de no caer varias veces en los mismos errores, ya caí una vez en este y no lo pienso volver a hacer, por esto les dejo esta reflexión, espero que la disfruten.
