miércoles, 10 de abril de 2013

El Negocio del Fin del Mundo



No sé ustedes queridos lectores, pero yo siento que cada día es más común oír que ya tienen una nueva fecha para el "fin del mundo". Ya no sé si sentir que todo es una mentira o si todos somos inmortales ya que sobrevivimos al inevitable fin del cambio de milenio y a las famosas fechas del 21 de mayo, 21 de octubre y 21 de diciembre de 2012 (Sí, hablo sarcásticamente, sé que no somos inmortales). Y es más, ahora que ya pasamos todos con vida el 2012 del cuál yo vengo oyendo desde hace al menos 7 u 8 años, ya hay un pequeño rumor de que supuestamente Newton dijo que el fin del mundo sería en el año 2050. ¡Esto es el colmo! 

Y con base en esto hago una reflexión sobre el fin del mundo, que como el título de mi entrada dice, yo considero que hoy en día poner fecha para el fin del mundo no es más que un negocio. Por ejemplo una película muy taquillera fue la famosa película "2012" que trataba precisamente de cómo se suponía que se iba a terminar el mundo. En lo personal jamás vi la película pero sé de mucha gente que si la vio y supe que con la película ganaron millones de dólares. Otro ejemplo, estaba muy pequeño para el famoso cambio de milenio como para recordar algo pero sé que mucha gente comenzó a buscar provisiones como para sobrevivir en el caos que se iba a provocar y la gente en general estaba enloquecida por el hecho. Y ejemplos así nos dicen cómo los negocios ganan dinero de una forma u otra cuando hay un "fin del mundo". 

Ahora bien, en general, la economía mundial está basada en la confianza de los inversores y de la gente para poner a circular el dinero, por lo tanto en el sistema económico se puede especular mucho. Si yo vengo y le digo a la gente que el fin del mundo se acerca, la gente puede reaccionar diciendo "todo el dinero no me va a servir de nada cuando me muera" y empezar a gastar. Es o bien esa reacción o una especulación de los empresarios para decir: "Si el fin está cerca puedo poner el precio que yo quiera y la gente como lo necesita lo va a comprar, especialmente sabiendo que el fin está cerca". Y es más, yo he visto casos en los que ni siquiera un fin del mundo tiene que avecinarse para que los empresarios especulen con los precios, simplemente con cualquier fenómeno como una sequía, un huracán o cualquier cosa, porque la gente automáticamente culpa al fenómeno del alza en los precios sin pedir más justificación, cosa que ocurre muy claramente con la "escasez de petróleo".

Entonces, ya habiendo puesto estos ejemplos, creo que usted como lector ya ha comprendido que mi reflexión sobre el fin del mundo y mi razonamiento apuntan a que nos están usando para crear negocio, crear especulaciones legales en el mercado e inflar los precios. Afectando mucho a países en vías de desarrollo y a economías familiares que al final son las que tienen que estar bien para que la economía crezca.

Por eso finalizo con algo que me gusta mucho decir: "Por favor, hay que ser capitalistas, pero aprender a ser conformes" lo que para mi significa que si bien cada quien tiene lo que se gana, no hay que querer tenerlo todo a pesar de dejar sin nada a los demás, hay que considerar que los demás también son personas.


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